¿Por qué soy evangélico?

Los creyentes en Cristo han sido conocidos en el mundo a través de muchos nombres, algunos no son muy honrosos, otros sí. Se les ha llamado discípulos, cristianos, protestantes, herejes, convertidos, entre otros. Pero quizás, hoy en día, el nombre más común con el que se conocen los creyentes y el más generalizado de todos, es el término evangélico.

Precisamente en este artículo mi motivación es exponer algunas razones de porque soy evangélico, aunque son muchas, no obstante me limitaré a enumerar tres de esas razones.

1. Soy evangélico porque proclamo el evangelio.

El evangelio es la esencia del mensaje cristiano. Fue el mensaje que proclamó el mismo Cristo y sus apóstoles. En Marcos. 1:15 Jesús predicaba diciendo: “El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio”.

Pablo declaró en 1 Corintios 9:16 “Pues si anuncio el evangelio, no tengo por qué gloriarme; porque me es impuesta necesidad; y ¡ay de mí si no anunciare el evangelio!” 

Para Pablo no solo era un privilegio proclamar el evangelio, sino también hasta sufrir por causa de él

 Para el apóstol Pablo no solo era un privilegio proclamar el evangelio, sino también hasta sufrir por causa de él. Por ese mensaje fue: encarcelado en Filipos, apedreado en Listra, expulsado de Tesalónica y de Berea, burlado en Atenas, tenido por loco en Corinto y como blasfemo en Jerusalén.

2. Soy evangélico porque el Evangelio es el poder de Dios mediante el cual salva a los pecadores por la fe en Cristo

Pablo dijo en Romanos 1:16 “Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.

 En 2 Corintios 4:6 hablando de la obra que el Señor realizó en nosotros el día de nuestra conversión, el apóstol Pablo explica como fue que ese poder de Dios obró en nuestro corazón, dice: “Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo”.

 El pecador debe entender lo que todo cristiano comprendió el día que Dios nos abrió los ojos, que la obra de salvación que Cristo realizó fue perfecta y que Dios el Padre aceptó el pago que Dios el Hijo efectuó en la cruz del Calvario.

3. Soy evangélico porque el evangelio es un mensaje que tiene a Cristo como figura central.

El evangelio no solo es un mensaje acerca de Dios, acerca del pecado y acerca del arrepentimiento, sino que también es un mensaje acerca de CRISTO.

Cristo es la esencia misma del mensaje evangélico. Predicar el evangelio y predicar a Cristo, es exactamente lo mismo. Cualquiera que sea el aspecto que analicemos de ese mensaje, terminaremos siempre topándonos con Su Persona. Y si en algún punto lo perdemos de vista, es posible que nos estemos extraviando por un camino de error y falsedad.

Nadie será salvo a menos que llegue a comprender el mensaje que el evangelio anuncia. Ningún pecador será salvo a menos que comprenda quién es Cristo y qué vino a hacer a este mundo.

Por esas y otras razones, soy evangélico.

Escrito por:

Félix Monegro, Director de producción y locutor de Eternidad Plus . Puedes seguirlo en sus redes sociales Instagram y en su canal de YouTube

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